Cuando vi esta historia en Internet el silencio me rodeó y la imagen de esta niña sonriente se grabó en mi mente, debatiéndome entre la tristeza y la admiración. Tanta desgracia a la par de tremendo coraje. Qian Hongyan , una pequeña niña china de cinco años perdió las piernas en un accidente de auto. Ante la pobreza de su padre no hubo prótesis ni nada por el estilo. La movilidad se resolvió con unos cepillos gastados de lavar ropa para que dieran soporte a sus manos y una vieja pelota de baloncesto en el que se abrió un orificio para encajar su cuerpecito y se le sirviera de sostén cuando estaba en el suelo. A partir de ahí se le conoció como la niña de la pelota de basketball.
Pese a sus tremendas limitaciones, la pequeña aprendió a vivir con ellas y no perdió el entusiasmo por la vida, llegando a destacar en los estudios.En su escuela, en Luliang, sus compañeros la ayudaban a salir de la bola para ubicarse en su humilde carpeta y luego nuevamente a entrar en ella para poder ir rebotando al recreo o a su casa. Tiempo después una donación permitió que se le otorgue un par de piernas ortopédicas especiales con las cuales inició un proceso de rehabilitación. El empuje de esta pequeña es de tal magnitud que hasta aprendió a nadar, pese a no tener piernas con qué patalear.
Al parecer en la actualidad tiene diez años y mucha gente la está apoyando, con lo cual su vida sigue siendo en extremo difícil, pero algunas condiciones han mejorado mucho.
Podría escribir mucho al respecto, pero creo que es innecesario. Qian Hongyan nos regala una canción de esperanza, demostrándonos que la edad y la sabiduría no siempre van de la mano. Su vida es el mejor mensaje de superación y amor por la vida que se pueda pedir. Y basta.
Es increíble toparnos con los umbrales del saber hasta que nivel el ser humano es capaz de adaptarse y salir adelante,..., y hasta que nivel nuestra indiferencia construye civilizaciones y mundos donde personas terminan utilizando un balón , como si se tratará de caracoles.
ResponderEliminarHay un clamor moderno y creo que subyace a la existencia de tener la opción de elegir,..., por que cuando no tenemos elección, no hay depresión, ni llantos , ni ataques de pánico, a lo mucho hay un balón de basket para avanzar.
Tu profunda sensibilidad y conocimiento de la naturaleza humana se convierte en homenaje a esta niña y a todos los que, de una y otra forma, salen adelante en la vida abriendo camino, utilizando como una riqueza lo que otros desperdiciamos, sea tiempo, talento, dinero o un simple balón...
ResponderEliminarEsto es un hoax muy antiguo
ResponderEliminarLo siento, estimado(a) amigo(a), esta sí es una historia real. No hay fotos trucadas ni nada por el estilo. Aunque parezca inaudito y difícil de creer, es posible vivir sin extremidades y la parte inferior del cuerpo amputada.
ResponderEliminarEn el siguiente enlace se puede ver parte de su proceso de adaptación a las prótesis y a una vida de pie, sin tener que arrastrarse por el piso sosteniendo su cuerpo con la ayuda del balón.
http://www.youtube.com/watch?v=gDBZkPcgtNE